Cada día está más demandada la instalación de puertas automáticas en Madrid centro, esto es porque es un elemento muy común, pero también muy peculiar. A continuación, te vamos a contar algunos datos curiosos que harán que te sorprendas.
¿Sabes cuál fue la primera puerta automática? Seguramente estés pensando en un año más reciente, pero no, la primera puerta fue inventada en el siglo I d.C. por Herón de Alejandría, un inventor greco-egipcio. Este ingeniero quería que las puertas de los templos se abrieran solas y lo consiguió gracias a un mecanismo de poleas que utilizaba la energía del vapor de agua que obtenía al calentar fuego en un altar.
Ahora sí, en la década de 1920, más cerca de nuestros días, aparece la primera puerta automática eléctrica. La compañía Overhead Door Corporation instaló la primera puerta de garaje ascendente con un motor eléctrico en plena post revolución industrial.
Seguramente sepas que el mando de la tele es distinto al de una puerta automática, pero… ¿Por qué lo empleamos igual? Es decir, apuntamos a la puerta o al motor como si fuese una tele, pero realmente no es necesario, ya que estas puertas funcionan por una señal de radio.
La puerta automática más grande del mundo ocupa 75 metros cuadrados, está en Méjico y da la vuelta entera a una casa. Esta colosal puerta de vidrio pesa la friolera de cuatro mil kilogramos.
¿Sabías que existen puertas automáticas piratas? Sí, como lo lees, toda instalación de puertas automáticas en Madrid centro y en cualquier otra localidad tiene que estar sujeta a una regulación. Por eso existe un mercado de puertas automáticas más baratas, pero menos seguras.
Ahora que ya conoces un poquito más sobre las puertas automáticas, puedes sacar conversación sobre ello si fallan y te quedas atrapado en un ascensor. Pero, esto no pasará si llamas a Cierres Metálicos E. Merino porque son una empresa segura, seria y profesional que hace las mejores instalaciones.